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Esta historia empezó un domingo 19 a las 19:11 con dos desconocidos: un comunicador que vivía en el 20 de julio de su ciudad y el otro, también comunicador quien tAmbién habitaba en el barrio 20 de julio de su ciudad. Dos desconocidos que se terminaron cruzando por misterio, algoritmo o preferencias en una app de citas. La razón por la que terminaron allí es desconocida.
- Hola
- Hola como vas?
No habían pasado dos días desde aquel primer contacto y ambas almas ya habían intercambiado sus números de contacto. Con la inocencia y la cautela que amerita el intercambiar mensajes con un desconocido a las 19:11 de un martes 21, ambas almas notaron que tenían las mismas carreras, muy pronto tendrían la misMa edad y que el uno medía 1.70m y el otro 1.72m. Acto seguido se inspiran con las ideas que fluyen por la cabeza del otro: notas musicales y el lenguaje del sonido del mundo o imágenes aleatorias y cámaras por ojos ¿Cuál es la diferencia si eran sus musas, las artes que los mantenían vivos?
La búsqueda afanosa por encontrar algo en común y no creer que sería una charla que acabaría en desinterés y mensajes sIn contestar en una semana - como es lo usual en esto de las citas por internet -, llevó a ambas almas a enterarse que estarían asistiendo al mismo festival de música que llevaban añorando desde hace dos años.
Sin expectativas sobre el que podría ser el primer encuentro, esta historia avanzó un domingo 27 a las 19:11 ambas almas sabían que estaban en aquel festival de música. Decenas de miles de corazones exaltados por los beats descontrolados de aquel roquero estadounidense afectado por la altura de la ciudad, o la rapera de signo Libra que movía el trasero al son particular de los aplausos de los asistentes. Aquellas dos almas no sabían donde estaba su contraparte, pero andaban con la seGuridad de que el otro estaba ahí, en algún lugar, de que se verían en cualquier momento.
- Mientras ella cantó pensé en tí… Hubiera sido lindo vernos -. Dijo una de las dos almas sin reflexionar o incluso meditar mucho el comentario sobre la presentación de la rapera atrevida.
Sin anticipación, la otra alma estaba sintiendo cómo se debilitaba de nuevo ¿Era propio hacerlo? No existía certeza sobre cuánto tiempo iba a durar pero se sentía bien: “¿Qué sentirá él?” se preguntaba. Para volver a poner los pies sobre la tierra se decía frases como “Cuando me vea dejará de pensar lo mismo, sin filtros las cosas se ven con claridad”, acostumbrado a que esa era la dinámica: hacer match con cualquier desconOcido, hablar un par de meses, verse en persona, ver la cara de decepción de la otra persona por el físico y finalmente dejarse de hablar, una de estas dos almas intentó dar prórroga a la primera cita para que la magia, que se apagaba cada primer encuentro, durara un poco más.
Sin embargo, esta historia avanzó un domingo 3 cuando a las 19:11 se dieron la mano por primera vez mientras hablaban de astros, compatibilidades, perSonalidades y futuro. El aries más nervioso que el virgo, el virgo más temerario que el aries, no importaba si las reglas astrológicas variaban, alguien no podía controlar el sudor en la palma de la mano mientras hablaban de lo que se sentía comer comida de mar y las bizarras investigaciones periodísticas que se han hecho sobre el tema. Todo mientras una de estas dos almas sentía que era ahí donde debería estar y sin tener certeza sobre lo que pasaba y lo que se sentía. La telequinesis aparece cuando el otro le confirma:
- ¡Ah! Ya no hay nada qué hacer. Ya es mío - Afirma una de las dos almas, no sin antes cerrar su conjuro con un sutil apretón a la mano que tenía sujetada.
Un abrazo final y a las 21:19 aquel medio de transporte rojo los separaba por primera vez, tan rápido como el primer contacto que tuvieron, tan raudas como las emociones que fluyeron aquel domingo. Ninguna de las dos almas lo notaba pero la brevedad con la que tOdo avanzaba no les daba tiempo de mirar las estrellas, contarlas y fundirse con ellas, no había chance para pensarlo porque a las dos almas les dijeron que todo tiene que ser fugaz, tan felizmente lamentable como para que la ruptura dure un par de meses y saltar a la siguiente cita a las 19:11 sin peso, creyendo que todo es una casualidad frugal única en su momento.
¿Qué seguridad podía existir entre estas dos almas nuevas? Se veían por primera vez y los 15 días de mensajes entre las cobijas y noches de frío fueron suficientes que terminaron convenciéndose de que en cualquier momeNto serían compañeros de vida. La fecha no estaba marcada en el calendario pero iban camino a algo, o eso creían cuando entre sueños se dedicaban cartas diciendo: “Esto va en serio”.
Con la seguridad que promete lo desconocido, esta historia avanzó un domingo 10 cuando a las 11:19pm hablaron desde la distancia por dos horas de esos temas que nunca pasan de moda. Los amigos homónimos al otrO, los peores signos del zodiaco para el otro, y el futuro. Dos horas más tuvieron que pasar para oprimir el botón rojo en sus teléfonos e irse a dormir con una sonrisa en la cara. En aspiraciones noctámbulas y visiones ficticias ambas almas veían potencial el uno con el otro.
No pronunciaban promesa alguna sobre el futuro porque el espectro de la inseguridad zigzagueaba, se movía lento pero empezaba a invadir las mentes de ambas almas en preguntas que eran como: “¿Y si él se vuelve como aquel fulano que olvidó el cumpleaños?”, “¿Y si tu físico no le atre pero le da miedo decirlo?” “¿Y si se termina volviendo como esa herida que ya cerró?” “¿Qué pasará cuando ya no se sienta igual?” “¿Y si la distancia de ambas ciudades nos termina separando aún más?" "¿Qué haré cuando esto termine?” “Definitivamente no quiero volver a sentirme como en esa ruptura de hace un año”.
Con conflictos latentes del pasado, esta historia avanzó un lunes 11 cuando a las 00:19 una de las dos almas se convenció de que estaba en el lugar correcto cuando la otra alma le dice "mi vida es mucho mejor desde que te conOzco (...) espero poder generar lo mismo en tí". Justo en una fecha en la que los invitados nunca llegaban a la fiesta, en la que los narcisistas usaban psicología inversa para hacer sentir culpable a esta alma de no poder llegar justo a la hora del brindis, cuando las rupturas de centros comerciales y cafés hicieron crecer espinas sobre una de las dos almas. Alguien por fin estaba ahí y era el primero en estar. El hombre que alcanzó un hito, el que atravesó la valla, el alambrado de emociones de un ariano caricontecido.
Sobre el cumpleañero, la fiesta ya no era por o para él; por fin dejaba de ser solo sobre él y lo que le habían hecho antes. Era sobre Quien esperaba que su vida haya mejorado desde que se conocieron aquel domingo 19 a las 19:11. Antes de abordar el vuelo sin retorno a emociones que se experimentan una vez cada cinco años, una de estas dos tristes almas no dejaba de preguntarse:
¿Cómo puedo decirle que lo quiero mucho sin que al terminar de conjurar el hechizo se fuera corriendo de mis brazos como todos lo hacen?¿Cómo puedo decirle que quiero estar con él sin importar cuando tenga que pasar?: Hoy, ayer, mañana, en once meses, en 19 semanas en realidad no me importa el día del calendario mientras sigamos avanzando con honestidad y seguridad.
Han pasado 19 minutos u 11 días en ese avión. A mayor altura se pierde la noción del tiempo pero ambas almas soñaban con que la aeronave los reUniera de nuevo. El lugar seguro era el otro. Empero, lejos de sueños y aviones de papel ambas almas golpean la realidad al darse cuenta que solo ha pasado menos de un mes desde que se conocen, una semana apenas desde que finalmente reconocieron sus rostros y figuras. En el comentar popular se dice que “fácil viene, fácil se va” ¿Qué pasará cuando el avión separe a ambas almas sin punto de retorno?¿Qué pasará cuando ambos se tengan que despedir?¿Estarán expectantes en el aeropuerto esperando cuando ambas almas estén listas?¿Chocará la aeronave en montañas de separación y tristeza por lo que pudo ser?
Volviendo a ser un nIño en el mar, una de estas dos almas no dejaba de pensar en su gato bicolor y en lo que dejó atrás en la metrópoli: el que podría ser el amor de su vida o el de la temporada; quería que la felicidad que venía sintiendo desde hace un mes se prolongara pero no sabía cómo.
El avión aterrizó con tranquilidad y ganas feroces por el reencuentro. Fuera de las expectativas, ambas almas se reencontraron de nuevo un sábado 23, a las 19:11 un alma tenía su cabeza recostada sobre el hombro del otro. Habiéndose dedicado un par de baladas, letras sobre el autoreconocimiento, llantos sobre la depresión en ruido blanco y música country sobre lo raro que se siente sentir algo por alguien de nuevo; ambas almas cElebran el estar juntos otra vez intercambiando un cadena que huele a mar y un peluche redondo que tiene forma de oso panda o gato bicolor.
Cierran el intercambio con su primer beso como acto de agradecimiento. Se dan cuenta que son casi las 21:19 otra vez y corren de nuevo a separarse no sin antes levitar de nuevo con un par de besos y abrazos más, mientras se despegaban del suelo dejaban el pasado y los golpes de antaño atrás.
En la noche, una de nuestRas dos almas perdido en emociones y textos sin completar recita antes de dormir:
¿Cómo le digo que solo lo he visto dos veces y ya lo extraño? Su figura de niño, su mente de grande, sus abrazos que me hacen sentir como en casa, sus besos que me sacan del planeta, su mano suave que me invita a saltar con él.
¿Cómo le explico que ha sido el mejor hombre que he conocido? Nunca me hizo sentir inseguro sobre quién era, nunca me hizo sentir incómodo o incompleto, nunca me sentí fuera del lugar o vacío mientras estaba con él ¿Cómo le explico que quiero seguir viéndolo y conociéndolo como sea?
Sin saber si lo que ha pasado entre ambas almas es algo real o era pura cortesía, pasan los días de nuevo. Un par de mensajes que guardan como intención el compartir tiempo con el otro sin saber cómo O cuándo pasará otra vez. Una de nuestras dos almas mira al cielo y recita:
“Mientras nos deshacemos de las armaduras, nos ponemos nuestros collares del destino y vamos sellando nuestro comienzo con un suave beso. Mi mente no deja de castigarme con preguntas, como es usual cuando siento algo nuevo: ¿Cuánto durará esto que siento?¿Por qué me siento tan seguro?¿Estará él pensando lo mismo?
Tal vez no haya certeza sobre el futuro, ni de lo que pueda pasarnos en el proceso; todo va sin expectativas o afanes infantiles por suplir. Pierdo la concentración, miro a la gris ciudad que ha visto cómo mi corazón se rompe una y otra vez en un ciclo que parece nunca acabar; de repente me despierto de la pesadilla que viene en cumpleaños olvidados y emociones intensas jamás retribuidas.
Vuelvo a tierra, abro los ojos y lo primero que veo es su mirada Virgo diciéndome en secreto que todo va a estar bien mientras vayamos con sinceridad, le doy la mano y lejos del miedo me dice que 'lo hago feliz', es allí cuando me doy cuenta que el ciclo infinito parece al fin romperse, me doy cuenta que, por ahora, estar con él es todo lo que quiero hacer”.
Oración lanzada sin esperanzas, sin intenciones ocultas, sin miedo. La otra alma comenta que compartió el verso lanzado al aire con sus amigos porque quería confirmar que lo que estaba consignado allí era real: ¿Qué sentirá ahora?¿Qué pensamiEntos cruzarán por la mente de esta noble alma?¿Cómo reaccionará él cuando se entere de todas las poesías que su otra alma le escribió después de presenciar las manifestaciones más bonitas de cariño que ese pobre ha visto jamás?
Con muchos temores sobre el pasado un miércoles 11 a las 19:11 las dos almas confundidas hablaron con la barrera de la distancia en el medio sobre el rumbo que estaban tomando las cosas ¿Amigos?¿Desconocidos?¿Conocidos con dudas?¿Están saliendo?¿Se ven de vez en cuando? La charla se cerró con más preguntas que respueStas. Interrogantes elevados al cielo así como levitaron el sábado 23 cuando se entregaron sus corazones en un beso. El andar en ciclos intensos de preguntas que no tendrán respuesta sino en futuro los llevó a avanzar dudosos como “amigos” ¿Qué significará?¿Cuáles son las reglas que hay que seguir?
¿Podrán seguir dedicándose “te quiero” sutiles para levanTArse el ánimo cuando el otro haya tenido un mal día?¿Podrán andar y conocerse con seguridad a pesar de que ya no se repita la magia de dos encuentros aunque ambos quieran?¿Será la “palabra con a” un amortiguador a la hora en que estas dos almas tengan que despedirse para siempre?
A pesar de las dudas, la confusión y la amenaza de reabrir heridas del pasado; sin duda, estas dos almas nunca se habían sentido tan seguRas y tan confiadas de querer pasar tiempo con alguien y solo habían pasado un poco más de dos meses desde aquel domingo 19 a las 19:11.
…
Más simple - El epílogo
Desearía que fuera más simple,
Volver a las cervezas y vinos mientras canto himnos sobre estar solo de nuevo,
Pero, cuando de mis amigos estoy rodeado,
No puedo evitar pensar en las oportunidades perdidas y las canciones que nos compartíamos a la mitad de la noche.
Desearía que fuera más simple,
Tomarme un día o dos para empezar de nuevo y prometerle el mundo a alguien más,
Pero en mi sueños no puedo evitar verlo.
Las memorias me persiguen, las voces se repiten una y otra vez.
"Él dijo que iba en serio", ¿Cuando me convertí en el juguete?¿Cuando se alzó el telón del circo?
Ahora la audiencia se burla de mí, el payaso en el trampolín que sigue creyendo en mimos que nunca se quedarán.
Desearía que fuera más simple,
Ser la llama alocada y descomplicada que era antes,
Pero cuando toqué tierra me olvidé de lo que era, eché raíces y cual niño inocente, sigo esperando.
"Me dijo que pronto estaría aquí", me consuela mi mente para evitar complicarme con la realidad,
Para hacerme a la idea, lentamente, de que jamás volverá.
Desearía que fuera más simple,
Mover mis extremidades con tranquilidad, poder correr de nuevo.
Pero cuando él no está, me duele respirar,el corazón se quiere salir y los ojos se vuelven mares.
"Quiero hacerte feliz", me dijo alguna vez mientras le dedicamos serenatas a lo eterno.
Ahora estoy solo tocando mi guitarra, los acordes melacólicos son permanentes porque alguien rompió la amarilla promesa de sonrisas infinitas en tiempos de blanco y negro.
Desearía que fuera más simple,
Poder empezar de nuevo
Sin la sombra de que nunca me quiso, persiguiéndome.
Sin las promesas rotas castigando mi mente.
Mi único remedio ahora es mirar al cielo y esperar que, en secreto, me piense y se de cuenta que nunca fue tarde, solo hasta cuando me di cuenta que ojalá y hubiese sido más simple.
INSPIRACIÓN
Alguien que me gustaba y yo.
Mi conocimiento en relaciones de cualquier tipo es proporcional al número de historias del baúl que han leído (relaciones de engaño, relaciones de interés, relaciones de amor no correspondido, relaciones de amigos, relaciones tóxicas y relaciones de amor propio). A raíz de tantas cosas que he escuchado y vivido siento que cuando conozco a alguien debo hacer las cosas lo mejor posible. Y cuando siento una pequeña falla opto por encarar a la otra persona o irme sin miedo. En aquella ocasión, mis amigos me decían cosas como: "parece que él te trata diferente a esta persona", "esta persona no haría lo que este hizo" que terminé abrumado y optando por pedirle un tiempo para convercerme de loe que decían mis amigos era verdad.
Luego de que el tiempo fuera corriendo me decían como "fue el peor error que cometiste", "escríbele ahora". Sembrando más dudas y pensamientos que no dejaban de fluir. Y, al andar con alguien que no estaba tan seguro de lo quería conmigo, en mi cabeza yo recogía: "me quiere, no me quiere, me quiere... ¿ no me quiere?¿me quiere?" Por eso, antes de que cayera en montañas rusas de pensamientos que se repiten una y una y otra vez por causa de alguien indeciso, terminé escribiendo esta historia.
Acto seguido, te das cuenta que el tiempo, de pronto fue un aliado. Resulta que esta persona me "ghosteó" e implícitamente me dio la razón... No quería estar conmigo y a la larga, yo tampoco quería estar con él. Pero cuando desapareció, yo estaba de nuevo cantando a grito herido la versión de 10 Minutos de All Too Well de Taylor Swift.
Cuando me di cuenta que no iba a volver y perder mi orgullo en el proceso (esperando como niño por alguien que nunca me quiso) retomé mi valor y en el proceso escribí un cierre para esta historia... Una especie de agradecimiento pero acto compasivo conmigo sobre lo duro que sería volver a ser el mismo de siempre.
Algo interesante que hice con la playlist de esta historia cuando la escribí, inconscientemente, fue usar las canciones que me "dedicó" (que de por sí ya eran una premonición de lo que temrinaría pasando) y hacer esa especie de call-and-response con canciones que yo conozco. Una conversación bonita, directa y honesta que me hubiera gustado tener con él.
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